Una casita dentro de otra casita. Un pequeño espacio para evadirse dentro de un hogar en el que se mezclan varios estilos decorativos con un sentido visual mágico. Lacasitademara -asi se la conoce en Instagram- es magia pura. Ella, su sensibilidad, su estilo y su casa. Y ahora también su espectacular pequeña caseta que ha creado en la azotea. Una caseta de resina no es lo más bonito del mundo pero Tamara -su dueña- ha logrado impregnar su buen gusto y personalidad y convertirla en un “espacio encantador”. Y muy práctico. ¿Quieres ver una caseta de resina transformada en un taller coqueto? Sigue leyendo.

La casitademara partía de esta caseta de resina

Anterior a esta, tenía una caseta de madera, a modo de trastero donde iba guardando “esas cosas de por si acaso”, pero tras unos años se había deteriorado. Tamara y su marido Javi decidieron montar otra pero antes tenían claro cuál era el primer paso: “hacer un Marie kondo y deshacernos de todas las cosas que no estábamos utilizando aunque estén nuevas”.

Un espacio de ensueño

Una caseta de resina de diseño moderno, bien aislada y con una claraboya en el tejado por la que entra mucha luz pero eso: una sencilla caseta de resina. Tamara solo pensaba en decorarla. Y en eso es experta y capaz de transformar  el lugar más inhóspito del mundo en el más acogedor y evocador. El resultado es, sin duda, espectacular e inspirador.

Taller de herramientas

Tamara y Javi no querían que solo fuera una caseta de trastero. “Queríamos darle una utilidad. Ahora que apreciamos tener un pequeño trocito al aire libre, reformamos toda la azotea. A Javi le gusta trabajar la madera y tiene bastantes herramientas y en casa no tiene el espacio suficiente para hacer este tipo de cosas así que decidimos montar este pequeño tallercito con el que está encantado porque puede trabajar tanto dentro como fuera cuando el tiempo acompaña, tiene todas las herramientas a mano”, relata Tamara. Y sí, nos enamora ver aquí nuestro organizador mural Tetris para ordenar todas las herramientas.

caseta de resina

Un pequeño taller de herramientas en el que Tamara también ha encontrado su pequeño rinconcito para tener a mano el menaje y el textil de cocina cuando la familia sube a la azotea a tomarse un aperitivo y también para una de sus grandes pasiones: las plantas. Los detalles hacen hogar y esta caseta está llena de ellos:  las láminas botánicas con el árbol de la vida en madera o incluso la disposición de las herramientas que utiliza para trasplantar. ¡Pura magia!

La calidez de la madera natural

“Elegimos vuestros muebles porque teníamos claro que queríamos añadir madera para aportar calidez al espacio. Además son súper versátiles y se le pueden dar diferentes utilidades. Lo primero que hizo fue customizar la mini cajonera”, explica Tamara quien ha transformado esta caseta de resina en un “pequeño espacio para evadirnos, para recrearte, para inspirarte, para crear cosas bonitas, Javi con sus creaciones de madera y yo que me encantan las manualidades, cuando me quiero despejar de casa y pasar un ratito sola,  creo que es un espacio coqueto e inspirador”.

Pintó el interior de blanco antiguo para darle más luminosidad ya que era del mismo tono que por fuera y ese marrón para el interior resultaba muy oscuro y no resaltaba para nada con los muebles de madera natural de Astigarraga Kit Line. Y para el suelo ha utilizado una alfombra vinílica imitación a suelo de madera que le ha aportado mucha más calidez.

No es el lugar más grande del mundo, pero vaya sí Tamara y Javi le han sacado partido al espacio. hemos titulado este post: una caseta de resina transformada en un taller coqueto. Después de ver esta transformación, ¿qué más adjetivos se te ocurren? Déjanoslos en comentarios.

Gracias por dejarnos decorar tu hogar de manera sostenible.